Dice Bernardo Toro, filósofo contemporáneo, que un signo reconocible de esta época es el cuido. La acción de cuidarnos unos a otros es indispensable y lo decía mucho antes de la pandemia. En estas épocas del COVID19, hasta puede salvarnos la vida; así de contundente.
El cuido no solo es de persona a persona, sino que es a nivel familiar, institucional y, por supuesto, empresarial. Asimismo, el cuido tiene relación con los afectos. Cuidarnos unos a otros no solo es responsabilidad social, sino también una apuesta afectiva a ayudarnos en la adversidad. Y es una de las tantas formas del amor pues, en su ausencia, ¿para qué nos preocuparíamos por los demás?
La Real Academia Española, rectora en temas de lenguaje, dice que el amor se define como un sentimiento de afecto, inclinación y entrega a alguien o algo. Puesto así, parece natural y lógico que uno pueda enamorarse de su empresa, ¿verdad? Y eso pasa a menudo con las PYMES: ¿qué empresario no se enamora de su empresa, la cuida, se desvela por ella y sueña con un futuro juntos?
Alguien en Google comento: “La idea ha sido tuya, has puesto todo tu esfuerzo en sacarla adelante, es tu pasión, te despiertas y acuestas con tu sueño, crece contigo. ¡Definitivamente estás locamente enamorado de tu empresa!”. Y, la verdad amigos es que, ¿quién no ha deseado que cada colaborador se enamore de su empresa, para cuidarla como un capullo que florecerá para todos? El que esté libre de pecado, que arroje la primera piedra.
El amor no solo puede darse en la empresa, sino que es una condición básica para que la empresa sea una comunidad humana capaz de conseguir resultados como rentabilidad, satisfacción y aprendizajes, capaz de sobrevivir y desarrollarse. Esto no es solo por altruismo, sino por necesidad de la propia organización, que debe impulsarse a través de sus valores, en los cuales no puede faltar el amor: una condición que promueve las demás buenas prácticas.
Amor a la familia, amor a la pareja, amor a la humanidad, amor en la empresa; siempre será más fuerte ese sentimiento que todos los demás. “Hay mucho más amor que nubes negras y es mucha más la luz que la oscuridad”, dice en su inmortal canción Rafael. Y tenía razón. Feliz día del Amor y la Amistad para todos los enamorados del planeta, ¡pura vida!
Silvia Alvarez
Directora Sostenibilidad de Logosoft
